Ilusiones de Papel - Productos personalizados para niños

Si vais a celebrar  en casa la Primera Comunión de tu hijo, y entre los invitados hay un montón de niños, es importante que tengas preparada una buena lista de juegos. Después de que tu hijo reparta los Recordatorios de Comunión y los regalos para los invitados, toca divertirse a tope. Éstas son nuestras propuestas.

A parte de los ya conocidos “A la zapatilla por detrás”, “La gallinita ciega”  o “Las sillas musicales”, te proponemos otros juegos infantiles que, además, hemos adaptado a esta celebración. Así tu hijo se sentirá aún más especial. Toma nota.

Antes de empezar, te recomendamos que nombres uno o dos "directores de orquesta" para que los juegos sean más organizados. Para ello, elige a los dos mayores del grupo de niños. 

Ponle el traje al niño de la Comunión  
Se trata de una versión de “Ponle la cola al burro”. Imprime una foto del niño que haga la Primera Comunión a gran tamaño (lo puedes hacer por partes). Recórtala en trozos (cabeza, chaqueta, corbata, zapatos…), pega un trocito de celo de doble cara por la parte de atrás. Reparte los recortes a los niños y tápales los ojos. Deja que se vayan acercando para pegar los trozos en una cartulina en la que sólo aparezca la cabeza del niño. Ganará el que haya acertado más pegando su trozo.

Carrera de huevos
El día anterior de la Primera Comunión cuece unos huevos y deja que tu hijo los decore con un rotulador con las letras de su nombre (cada huevo, una letra). Reparte a los niños en dos grupos y ponles en fila. En un tiempo determinado, y con la ayuda de una cuchara, deberán intentar trasladar todos los huevos que forman el nombre del niño a otra mesa colocada a cierta distancia. Cuando acabe el tiempo, ganará el equipo que más letras haya trasladado.

El teléfono roto del protagonista de la Comunión  
Divide a los niños en dos grupos. Invéntate dos frases que tengan que ver con el protagonista de la Comunión (“Jaime ha hecho hoy la Comunión con todos sus compañeros y ahora estamos celebrándolo con una fiesta muy divertida” y otra distinta). Luego, dile una frase al oído al primero de cada equipo para que vaya pasándosela al resto en susurros y muy rápido. El último tiene que decir en voz alta lo que ha entendido. ¿Quién gana? El equipo que haya distorsionado menos la frase. Las risas están aseguradas.

A pelotazo limpio 'con sorpresa'
Divide a los niños en dos equipos y sepáralos a una distancia de unos 5 metros. Dale a cada grupo un cubo de pelotas hechas con papel de aluminio o de periódico. Previamente, en una de ellas, habrás escondido el nombre del niño que hace la Primera Comunión. Cada equipo tiene que lanzar las pelotas al otro. Pasados 5 minutos, haz recuento de las pelotas que tiene cada grupo. Ganará el equipo que haya conseguido quedarse con menos pelotas… ¡a no ser que el grupo que más pelotas tenga, se haya quedado, sin saberlo, con la que esconde el nombre del niño de la Comunión! Abridlas y descubriréis al verdadero equipo ganador. Emoción hasta el final.

Un puzle de Primera Comunión  
Imprime una foto lo más grande posible del protagonista de la Primera Comunión. Dibuja sobre ella las piezas de un puzle, y recórtalas. Mételas en una bolsa. Cada niño ha de sacar una pieza. Cuando todos tengan una en la mano, pon el cronómetro a contar. Si son capaces de montar el puzle y descubrir al personaje, dales algún premio.

Globos rellenos  
Ata una cuerda de árbol a árbol y de ella cuelga globos con cosas dentro. En unos mete confetti, en otros, harina, lentejas, garbanzos… y en otros, caramelos, una pulserita, unas canicas... Clava un clavo pequeño en un palo. Tapa los ojos a los niños y con las instrucciones que le deis los demás (gritando, claro) tiene que lograr romper el globo. Lo que caiga es para él. 

Angelito o demonio
Sienta a los niños en círculo. Deja a uno de pie, al que le toca ser “demonio”. Éste tiene que empezar a dar vueltas por el círculo, tocando las cabezas de los niños y diciendo alto y claro “angelito” o “demonio”. Si dice “demonio”, el niño se tiene que levantar e intentar pillar al otro demonio. Si el primero consigue sentarse en el sitio que el otro ha dejado libre, conseguirá convertirse en “angelito” y el otro la ligará. 

Carreras a la 'pata de palo'
Coloca a los niños por parejas, juntando a uno mayor y a otro pequeño. Atáles el tobillo derecho de uno al tobillo izquierdo del otro. De esta manera, tendrán que hacer carreras. Gana el que llegue a la meta en el menor tiempo.

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